Ruta 3 días desde Marrakech al Desierto

El primer día comienza con un temprano encuentro en Marrakech, la ciudad roja, famosa por su medina vibrante, sus jardines y mercados. Desde Marrakech, te adentrarás en las montañas del Alto Atlas, donde podrás admirar impresionantes vistas panorámicas y pasar por pequeños pueblos tradicionales. A lo largo del trayecto, el paisaje se vuelve cada vez más árido, dando paso a las formaciones rocosas que dominan el sur de Marruecos. La primera parada importante será Ait Benhaddou, un antiguo ksar (ciudad fortificada) que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este conjunto de construcciones de adobe, con su arquitectura tradicional y su ubicación estratégica sobre una colina, ha sido escenario de numerosas películas famosas, como Gladiator y Juego de Tronos. Al pasear por las estrechas callejuelas de Ait Benhaddou, podrás sumergirte en la historia y la cultura local, disfrutando de las vistas que el lugar ofrece desde lo alto de la colina. Después de explorar Ait Benhaddou, el viaje continúa hacia el Valle del Dades, conocido por sus impresionantes formaciones rocosas, conocidas como las “Torres de Dades”, que se elevan majestuosamente entre los valles. Este valle es famoso por sus paisajes de colores cálidos, sus oasis y sus pueblos bereberes, lo que lo convierte en una parada perfecta para disfrutar de la naturaleza y la cultura local. Al caer la noche, te alojarás en un riad o hotel tradicional, donde podrás relajarte y disfrutar de una deliciosa cena marroquí.

El segundo día comienza con un viaje hacia las famosas Gargantas del Todra, un impresionante cañón de roca esculpido por el río Todra durante milenios. Las paredes de las gargantas se elevan hasta 300 metros de altura, creando un escenario impresionante para caminar y admirar la majestuosidad del lugar. A lo largo del camino, podrás disfrutar de las vistas panorámicas de las formaciones rocosas y los pequeños pueblos que salpican el paisaje. Después de explorar las gargantas, continuarás el viaje hacia el desierto de Merzouga. A medida que te adentras en el Sahara, el paisaje cambia radicalmente, dejando atrás las montañas y los valles para dar paso a las interminables dunas de arena dorada de Erg Chebbi. En Merzouga, te espera una experiencia única: un paseo en camello por el desierto. Montarás en camello y cruzarás las dunas, disfrutando del silencio y la paz del desierto mientras el sol comienza a ponerse, creando un ambiente mágico. Al llegar al campamento en el desierto, serás recibido con una cálida bienvenida y podrás disfrutar de una cena tradicional bereber bajo las estrellas. El desierto, en su silencio y vastedad, ofrece una experiencia mística que te permitirá conectarte con la naturaleza de una manera profunda.

El último día del viaje comienza con un temprano amanecer en el desierto. Las dunas se iluminan con los primeros rayos del sol, creando un espectáculo visual único. Después de un desayuno en el campamento, comenzarás el regreso a Marrakech, pero antes de volver, harás algunas paradas interesantes. El primero de estos puntos de interés será el Valle del Draa, un lugar conocido por su belleza natural y sus vastos palmerales. El valle se extiende a lo largo del río Draa y es hogar de antiguos pueblos bereberes que han vivido en esta región durante siglos. A lo largo del recorrido, podrás disfrutar de vistas impresionantes de los oasis, las palmeras y las montañas. El viaje de regreso a Marrakech también pasará por Rissani, un pequeño pueblo que es conocido por su mercado tradicional, uno de los más auténticos de Marruecos. Tras explorar Rissani, continuarás tu viaje de vuelta a Marrakech, cruzando nuevamente las montañas del Alto Atlas. Este último tramo te ofrecerá vistas espectaculares y una oportunidad más para capturar la belleza de Marruecos en tu memoria.